Conexión física y energética del útero y de la garganta
Que sea a través de la medicina china o de la comprensión de la anatomía de los fascias o del sistema nervioso, es cierta la existencia de una conexión entre el cuello uterino (cerviz) y la laringe, así como la conexión entre las cuerdas vocales y el suelo pélvico. Sí, nuestros órganos reproductivos están vinculados anatómicamente, energéticamente y neurológicamente a nuestros órganos vocales.
En este articulo, hemos decidido compartiros algunas formas sencillas de usar la voz o la relajación de la mandíbula para reducir la tensión en el útero, el cuello uterino, la vagina, la vulva y el perineo. A veces pensamos que nuestro suelo pélvico necesita estar fuerte con un gran poder de contracción para mantener una buena postura, y prevenir la incontinencia por ejemplo. Pero muchos traumas y tensiones se asientan y se quedan en esta preciosa región. Muchas mujeres podrían beneficiarse de ejercicios para relajarla, más que ejercicios para fortalecerla.
Energía:
Mientras que tu útero es el centro de tu intuición, y muchas emociones se almacenan allí, la garganta es el centro de la expresión. Es importante expresarse, cantar, incluso gritar, para liberar y procesar las emociones que han quedado enterradas. Pero, sobre todo, es crucial que aceptes escucharte a ti misma. Observa las respuestas de tu cuerpo durante este proceso y dale la bienvenida a lo que viene.
Permitiéndonos hacer sonido, trabajar a través de los miedos y resistencias que puedan surgir al expresar nuestros verdaderos deseos y poder, curamos los traumas que están almacenados en el útero, el cérvix, la vagina, la vulva y el suelo pélvico.
Fascias:
Cuando experimentamos desconexión, adormecimiento e incluso dolor en la zona del útero, es interesante relajar la mandíbula, ya que los músculos del suelo pélvico están conectados a la mandíbula a través de fascias. Al relajar la mandíbula, puedes relajar y suavizar los músculos tensos de tu suelo pélvico.
Neurología:
El nervio vago forma parte del sistema nervioso parasimpático, el que interviene en el descanso, la relajación, la reparación y la digestión. El nervio vago es estimulado por varios medios, como la respiración diafragmática y la vocalización. Y como el nervio vago también inerva el útero, entendemos que cantar puede ayudar a disminuir la tensión en el útero.
Un ajuste quiropráctico ayuda a reequilibrar la función del nervio vago, ayudando con los procesos citados arriba. Mejor descanso, sueño, digestión, y menos dolor de regla son comentarios que recibimos de algunas de nuestras pacientes. Nunca dudes en el poder de tu cuerpo y de la quiropráctica!
Atrévete a expresarte y tomar espacio, libera la grandeza de tu sagrado femenino, conecta con tu fuerza y tu vulnerabilidad, acéptate plenamente.
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